sábado, 23 de diciembre de 2017

Un gran cierre de año!


Terminamos el 2017 y solo me queda decir que ha sido el mejor año desde que abrimos el departamento de Terapia Ocupacional  ahí por en marzo del 2012. Este año nuevamente sobrepasamos nuestra meta de atenciones en comparación al año pasado, logrando  707 atenciones dentro del colegio y logramos realizar 100 atenciones domiciliarias, lo que es todo un record para nosotros. Todo esto no sería posible gracias a nuestros queridos y dedicados alumnos en práctica de clínica y pre clínica de la carrera Terapia Ocupacional, y este año les quiero dar las gracias nuevamente a la última rotativa de quinto años, compuesta por María José Lillo, Iván Correa, Francisca Farías, Camila Fernández, Leticia Ramírez y Andrea Reyes, quienes demostraron dedicación y profesionalismo al momento de realizar las intervención con los niños y sus familias, estoy seguro que les ira muy bien señoritas y caballero.
Este año fue especial porque desde que modificamos la sala de TO, que al comienzo era una bodega del colegio, este año cambie el piso gracias a la gestión de nuestra querida directora señora Ximena Verdugo, quien logro optimizar los recursos y conseguir comprar el piso de tatami 4m para las intervenciones de los niños en un contexto mucho más psicomotor, lo que favorece aún más las estrategias de orientación y movilidad de nuestro queridos niños. Gracias señora Ximena!
Este año también fue muy especial ya que nuestra querida directora deja su cargo, y ha sido muy difícil adaptarse a esta noticia, ya que ella más que una buena jefa, ha sido una gran líder, quien ha depositado su confianza y respaldo en todas las actividades de nuestro querido departamento de terapia ocupacional, permitiéndonos lograr atender a un gran número de niños y trabajar con sus familias, la extrañaremos mucho jefa!!!!!
Sigue siendo un año muy especial, ya que como muchos sabrán, el colegio Helen Keller forma parte de la red de atención temprana chile, la cual este año cumplió dos años, donde puedo cumplir un rol fundamental, el de miembro de la comisión de la red, como también, el de coordinador de la comisión de difusión y formación de esta. Estamos seguros que el 2018 será un gran año, ya que tenemos proyectos y actividades que ya hemos configurado este 2017.
Durante enero de este año se realizara en las instalaciones de CHK la primera y segunda versión de TO en la escuela, talleres teóricos prácticos de dos días, dirigidos a estudiantes de terapia ocupacional que estén interesadas en conocer las principales estrategias para desenvolverse en este maravilloso trabajo. Sera primera vez que se realiza este ejercicio, por lo que esperamos que sea todo un éxito. Buscamos que la experiencia sea dirigida y personalizada, por lo que los talleres estarán conformados por un máximo de 4 participantes por jornada. No olvides estar atento a las fotos y videos que publicaremos de esta experiencia.
Por último, este año y como es de costumbre, realizamos  ejercicios de autogestión, y fue así como conseguimos donaciones de juguetes y papelería de la fundación ideas para la infancia. Una cantidad de juguetes en excelente estado, los cuales, la mayoría se fue a las salas de estar de los niños y otra parte se quedó en el departamento de terapia ocupacional, donde también recibimos mucha papelería, lo que nos permitirá realizar bastantes manualidades no solo el 2018, sino que también el 2019, y de forma paralela el poder compartir con todo nuestro querido colegio.
Esperamos que el 2018 sea igual o mejor que este año, estamos muy ansiosos de saber cómo funcionara nuestro nuevo ascensor, ya que varias niñas y niños podrán venir por primera vez a nuestra querida sala de Terapia Ocupacional. Les deseamos a todos felices fiestas y siempre estaremos atentos a sus comentarios y sugerencias.
Álvaro Herrera Phillips, Terapeuta Ocupacional CHK Diciembre 2017.

alvaroh@chk.cl




Consulta por nuestro primer taller de verano al correo alvaroh@chk.cl


sábado, 2 de diciembre de 2017

¿Qué culpa tengo de ser inmigrante?

No solo soy Terapeuta Ocupacional, tampoco solo soy tutor de campo clinico, tambien soy docente de aula. Dentro de las asignaturas que realizo, los futuros colegas, Señoritas Marisa Álvarez, Bárbara Inostroza, Melissa Moya, Milader Olivares, y don Alan Rancuzi, realizaron un excelente ensayo sobre la infancia, la inmigración y la discriminación. Felicitarlas y felicitarlo por el asertivo documento. 


El presente ensayo tiene como objetivo dar a conocer nuestra visión sobre la gran relevancia del fenómeno migratorio en Chile, haciendo referencia y de especial importancia a los infantes extranjeros y el cómo esto puede afectar en ellos, dado el cambio radical que ocurre en sus vidas, partiendo por el simple hecho de no recibir una orientación sobre las razones de emigrar a Chile y hasta del no recibir una previa educación del país al que llegaran (tanto en cultura, lenguaje, entre otros).
La infancia y migración es un tema que hoy en día tiene a los profesionales muy interesados, por el hecho de que en nuestro país han llegado muchos extranjeros, especialmente Haitianos, pero es preocupante el caso de los niños, los cuales son “arrebatados” de su país de origen y llevados a otro sin poder dar su opinión, sin un conocimiento previo de a donde llegaran y el impacto socioafectivo que se le genera ya estando aquí, cabe destacar que muchas veces los infantes al  verse insertados en este nuevo entorno generan un auto desprecio por su cultura, y es tanto así que llegan a sentir un rechazo por su lengua nativa.
Pero ¿cómo podemos ayudar los chilenos para lograr una comunicación efectiva? Según la directora del grupo intercultural en el seminario de la CIFICH realizado en la Universidad de Chile, la Sra. Juana Campos habla sobre su ‘’Experiencia en el caso de la escuela Valle de la Luna en Quilicura”, hace alusión en base de su vivencia en el taller bilingüe del establecimiento en conjunto a sus alumnos (tanto chilenos como extranjeros), que para poder ayudar a los infantes migrantes en su desarrollo en este país lo principal es respetar y escuchar el idioma de origen, para que así ellos puedan adaptarse con mayor facilidad al establecimiento y a los sujetos ajenos a su cultura, a causa de este proceso los niños aprenden de mejor manera el castellano hablado, no sienten un auto desprecio por su cultura y al trabajar en conjunto con niños chilenos evitan la resistencia de estos.
¿Sera un programa educativo solo para el idioma?  La directora Campos hace mención de los diversos talleres del programa para los infantes inmigrantes, que no solo abarcan el lenguaje hablado y escrito, sino que también se enfocan sobre la orientación de la convivencia escolar, actividades de acción social, prevención de drogas y alcohol, entre otras actividades especiales que se entregan, tales como para  trastornos de comunicación y relación con el medio, trastornos motores, ayudándolos así a poder incluirse de mejor manera a la sociedad en la que viven hoy, logrando desenvolverse de mejor forma sin sentirse rechazados.
¿Cómo se logró este gran paso educacional? Campos nos expone esta experiencia en específico, aludiendo sobre las barreras de la comuna de Quilicura partiendo por la dificultad geográfica para trasladarse de la comuna a otras de la región ya sea para trabajo, estudios u otros y la gran cantidad de inmigrantes que ha conllevado a un agotamiento de las comunidades educativas ante la experiencia con los extranjeros y su llegada a los establecimientos. La directora del grupo intercultural comenzó este camino en el año 2015 mediante una asesoría técnica en la cual logra llegar al establecimiento Valle de la Luna proponiendo un taller bilingüe inclusivo, de esta forma consigue un compromiso con los funcionarios y el establecimiento mediante actividades recreativas, las cuales a través del tiempo han logrado un avance importante en la institución generando menos problemáticas a la hora de enseñanza en el trabajo en aula y en la convivencia diaria.
A sí mismo, el prejuicio que se ha dado en los niños es debido a sus padres, los cuales tienen complejidad para convivir con personas extrajeras generando un rechazo o "resistencia". Los adultos no toman conciencia del daño que pueden generar en los infantes con su poca tolerancia hacia los sujetos pertenecientes a otra cultura, como bien dice Juana Lorena Campos:
“Cuando llegaron los niños haitianos a la Escuela, los padres estaban muy molestos por la situación, donde nos propusimos a realizar espacios interculturales con los infantes, la cual con el tiempo ha tenido resultados favorables, pero a la Escuela es imposible realizar estos espacios para los padres, debido a que no quieren participar o por otros factores influyentes” (Representante del seminario "Infancia y migración") teniendo como factores influyentes la alta actividad laboral y muchos que simplemente no les interesa convivir con los haitianos y generar espacios de esparcimiento con estos.
Esto nos hace reflexionar que la educación de los infantes puede jugar en contra por los padres. La Escuela Valle de la Luna busca que las nuevas generaciones puedan comprender que la convivencia ha cambiado, debido a la variedad de la cultura y que se debe aprovechar los espacios interculturales, para que así se pueda experimentar más con la diversidad de idiomas, características personales de cada persona, y que gracias a esto nos hacen único e irrepetibles y que no se amerita un rechazo o prejuicio frente a los demás.
También podemos aludir que el auto desprecio se genera, debido a que siempre la persona busca "encajar" en la sociedad para poder ser aceptados, sintiendo desprecio por su lengua nativa y sintiéndose excluidos por sus pares, Juana Lorena Campos nos plantea como “Lamentablemente la sociedad chilena no respeta la cultura de los demás y menos el idioma, como por ejemplo muchos avalan el inglés, pero existe un gran rechazo al idioma indígena o en este caso el idioma Creole. Los niños son muy perceptivos y reciben sensaciones de desagrado. (Directora del grupo intercultural, representante del seminario "infancia y migración").
Otro punto que nos convoca es que, el Estado Chileno lo único que les asegura a los niños extranjeros es el ingreso al país y educación, pero no toma en cuenta otros factores esenciales para todo niño como la alimentación o los artículos escolares, en comparación a los infantes nacionales que tienen esa accesibilidad básica que debe tener un niño al ingresar a un establecimiento escolar. Simplemente para el niño extranjero no hay políticas que lo protejan ni le den una calidad de vida mínima.
Además, la política pública en relación a la interculturalidad no avanza y solo relaciona a la población nacional, excluyendo a la comunidad extranjera. Podemos añadir que no existe algún programa que les garantice a los inmigrantes haitianos acuerdos legales, como los que hay con otros países vecinos y a causa de esto, la población mencionada anteriormente no logra surgir por falta de oportunidades, obteniendo una deficiente calidad de vida, ya sea por educación, salud y políticas en general.
También podemos mencionar que el Ministerio de Educación no entrega apoyo económico al establecimiento, lo cual perjudica a todos los estudiantes de la escuela Valle de la Luna, donde la falta de recursos impide que los niños vivan otras experiencia, como por ejemplo falta de implementos para la realización de talleres, de espacios para compartir culturas, implementos para el apoyo de las clases y diversas actividades de recreación que ayudarían a los infantes a experimentar nuevas cosas, para fomentar la participación de ellos, trabajo en equipo y poder generar vínculos con sus pares, etc.
Con respecto a esto, el Estado aparte de no financiar al establecimiento, exigen cumplir los programas académicos que están en español, lo cual es un elemento en contra para los estudiantes extranjeros, debido a que no manejan el idioma al 100% y cuando lo manejan ya tiene cierto atraso en el aprendizaje esperado por el ministerio. Los estudiantes de la escuela Valle de la Luna tiene actividades extra programáticas que son realizadas por los voluntariados del grupo intercultural de la Sr. Juana Campos, pero por parte de la comunidad educativa estas instancias no existen, son impensadas y como bien dice "no existe estrategias pensadas u organizadas por parte del Estado, solo la buena voluntad del mundo que se organiza en torno a apoyar esta causa, lo cual creo  que todos tenemos que movilizarnos y no esperar a la autoridad que lo realice. Esas son las instancias individuales que pueden mejorar un poco el mundo"  (Directora del grupo intercultural, representante del seminario "infancia y migración").
A modo de conclusión y con respecto a las preguntas realizadas por nuestro grupo a Juana durante el seminario “¿qué se hace para que los niños chilenos modifiquen su resistencia antes los haitianos?” vemos que la respuesta de la Directora es un tanto triste frente a esta interrogante, mencionando que los niños no son xenófobos, que todo rechazo que ellos demuestran frente a los demás se instala en ellos como una especie de copiar lo que ven en sus casas, de replicar las malas prácticas de racismo de sus padres y ya al pasar el tiempo y convivir con sus pares ven que no hay peligro alguno ni maldad en la convivencia con ellos, haciendo de a poco el cambio y compartiendo sin problemas.
En la segunda interrogante “Desde el punto de vista de la psicomotricidad se está abarcando la integración de niños haitianos a través del juego, pero ¿cómo trabajan la parte emocional y psicológica de estos niños?, ¿se está haciendo algo?” recibimos una respuesta similar a lo ya mencionado, el estado no les proporciona a los extranjeros una calidad de vida, las políticas públicas no son para todos los niños, MINEDUC exige un aprendizaje mínimo al establecimiento sin importar las capacidades o diferencias culturales que puedan tener los estudiantes, los profesores cumplen con su trabajo del contrato, las psicopedagogas y educadoras diferenciales trabajan después de clases con estos niños haitianos, los programas que se están realizando en la Escuela Valle de la Luna son para niños del primer ciclo (1º a 4º básico), los demás estudiantes quedan excluidos de participar, los espacios interculturales son escasos tanto dentro del establecimiento como dentro de la comuna y los voluntariados trabajan exhaustivamente para conseguir una integración de todos los niños intentando compartir sus culturas, pero no se le puede exigir a unos pocos algo que debiese ser tarea de todos, en conjunto.

Entonces nos queda preguntarnos a nosotros mismos como futuros terapeutas ocupacionales y como personas naturales ¿qué hacemos nosotros para trabajar en este objetivo de eliminar el racismo? Si bien sabemos que no podemos pedir al estado estos cambios y nuevas políticas que incluyan, den protección y calidad de vida a los niños inmigrantes de forma pronta, pero si podemos cada uno empezar a generar las instancias de cambio, de derribar la intolerancia y el odio que hay frente a los extranjeros en nuestro país y así, como comunidad, ir dándoles más oportunidades en todo ámbito a los adultos para que estos a su vez puedan darles otro tipo de vida a sus hijos.